La Biblia, un libro universal

La palabra "biblia" es griega y significa "los libros". Efectivamente, la Biblia, más que un libro, es un conjunto de libros o una pequeña biblioteca formada a lo largo de mil cien años.

En ella podemos encontrar diferentes géneros y estilos literarios:

- Códigos de leyes (por ej. Exodo 21-23; Deuteronomio 19-27)
- Libros de historia (por ej. 1 Macabeos)
- Libros de poesías (por ej. Salmos o Cantar de los Cantares)
- Colecciones de proverbios (por ej. Proverbios)
- Novelas (por ej. Esther)
- Cuentos y parábolas (por ej. Jonás)
- Cartas (Baruc)
- Obras teatrales (Job)

Pero toda esta colección de géneros y estilos literarios, se ve unificada por dos elementos:

a) Una idea característica de Dios
b) Una idea característica del hombre

a) UNA IDEA CARACTERÍSTICA DE DIOS

En todos los libros de la Biblia, se da una peculiar y característica idea de Dios, Así, según la Biblia, Dios es:

1. ÚNICO.- El monoteísmo o convicción de que sólo hay un Dios diferenciaba la religión de Israel de las de los demás pueblos de la antigüedad que practicaban el politeísmo y la idolatría. (Éxodo 20, 3; Deuteronomio 13, 1-19; Isaías 43, 6-11; Isaías 46, 3-10)
2. COMUNICATIVO.- Para las religiones paganas y en la Grecia de los grandes filósofos Dios es inaccesible, permanece lejano y silencioso, es "El gran silencio del cosmos". El Dios de la Biblia se comunica, habla a través de sus enviados o portavoces llamados profetas. Para los cristianos, Dios habla sobre todo a través de Jesús, que es la Palabra de Dios encarnada; por tanto, el Dios de la Biblia es un Dios que se revela. (Salmo 115; 1 Samuel 3; 2 Samuel 7, 4-8; Job 40, 6; Juan 1,1).
3. SANTO.- Los dioses de otras religiones, aunque son mucho más poderosos que el hombre, están dominados por caprichos, pasiones, celos y toda clase de imperfección moral. El Dios de la Biblia es santo, infinitamente superior al hombre. Por ello, el hombre no puede permanecer en su presencia, porque, por muy bueno que sea, comparado con Dios es "impuro". Por esto mismo, Dios no puede ser representado en estatua o imagen y solo con gran reverencia puede pronunciarse su nombre. (Isaías 6, 1-8; Jueces 13, 17-28).
4. JUSTO.- No es un Dios indiferente ante el comportamiento de los seres humanos. Dios aborrece la maldad. No le basta, como a otros dioses, con que se cumplan los ritos religiosos, sino que exige al hombre que mantenga con sus semejantes unas relaciones basadas en la justicia. (Isaías 56, 1; Éxodo 23, 1-9; Isaías 58, 1-6)
5. LIBERTADOR.- Dios actúa y su acción se dirige a que el hombre sea libre de toda esclavitud interior y exterior. (Éxodo 3, 6-10; Isaías 49, 8-10; Salmos 91; 68, 21) Deuteronomio 6, 21-23 es el núcleo de la fe de Israel.
6. CARIÑOSO.- A pesar de que el tema del amor de Dios resalta de modo especial en el Nuevo Testamento, hasta el punto de que san Juan escriba en su primera carta "Dios es amor" (4, 8), ya en el Antiguo Testamento Dios se revela como amable y cariñoso (en palabras de la Biblia "clemente y misericordioso"). En el Nuevo Testamento Jesús, para explicar como ama Dios, recurre a la imagen del amor paternal y así, siempre que se dirige a Dios le llama "Abba", que en su lenbua significa "papá". En el Antiguo Testamento, los profetas prefieren utilizar la imagen del amor matrimonial. Dios es el "esposo" e Israel la mujer que traiciona su amor. El matrimonio tuvo lugar en el Sinaí por la Alianza. (Éxodo 34, 6; 48, 10; Ezequiel 16; Oseas 1 y 2).
7. RAZONABLE.- Los dioses de las religiones politeístas actúan según su capricho. El Dios de Israel es el Creador y todas sus obras obedecen a unas leyes inteligentes que el hombre puede y debe descubrir. (Isaías 44, 24-26; Salmos 19 y 33, 1-9; Eclesiástico 42, 15-25).